Presa Hoover

Una de las grandes atracciones del entorno de Las Vegas esta a hora y media de la ciudad, se trata de la Presa Hoover, expresión máxima de la capacidad ingenieril de los Estados Unidos.

Desde el centro de Las Vegas estas a una hora y media mas o menos, y en cuanto sales de la ciudad desierto, desierto y mas desierto…. nosotros estuvimos en Agosto y en esa época, pues 45º C y muuuucho calor. Así que es fundamental llevar agua, aunque allí puedes comprar en las tiendas del museo, pero a unos precios que te vas a arrepentir de no haberlas traído contigo.

Los accesos son muy fáciles, aunque cuando nosotros fuimos, los últimos 10 km estaba la carretera en obras, re asfaltando, y se montaron unas retenciones que no suelen ser habituales.

La presa inicialmente se conocía como la presa Boulder, pero ya que Herbert Hoover (posteriormente nombrado presidente de USA) jugo un papel muy importante en la financiación y construcción de la presa, pues le cambiaron el nombre.

Cuando llegas en coche, para aparcar tienes que pasar por encima de la presa, y esto te lleva del estado de Nevada al de Arizona. Donde puedes aparcar en unos parkings gratuitos habilitados para los turistas. Existen otros, que tienen una tejavana que te protegen del sol al coche. Merece la pena… 45ºC son muchos grados y por mucho coche “Made in USA” que tengas, los plásticos y todo… pues eso.

Hay gente de todas partes del mundo, escuchas muchos idiomas, y parte del atractivo de la visita son las vistas. Pero por ejemplo como tienen hechas las cimentaciones de las bases y la inclinación de las torres de acceso al parque de la subestación es impresionante. Cierto que seguro están modificadas y que no son las originales, pero llama mucho la atención.

El atirantado del cable y el calculo mecánico tuvo que ser de risa. ¿Como le explicas al cliente que las torres se tendrán que cimentar en la ladera y que tienen que estar inclinadas?

EL puente que se ve detrás, es de reciente construcción para evitar que tener que pasar todo el trafico por encima de la misma presa. En un principio lo llamaron el nuevo puente de la presa Hoover, pero finalmente le cambiaron el nombre en el 2004 a Pat Tillman Bridge Memorial, en honor a un jugador de fútbol americano llamado Pat Tillman, que después de los atentados de NY del 11 de Septiembre del 2001, decidió enrolarse en las filas del ejercito, abandonar su cómoda vida y marcharse a Afganistán, muriendo en combate en el 2004, y quedando en los registros como un ejemplo a seguir ya que renunció a todo por ir a defender los intereses de su pais a un pais extranjero, acertados o no esos intereses.

 

De camino al centro de visitas guiadas, pasas por delante de unas placas, estatuas y banderas que reconocen las aportaciones de todos los estados que invirtieron en la obra, de la gente que murió en la construcción de la presa, y lo mas curioso, hay un perro de bronce en memoria de un perro que no era de nadie, pero que se tiró toda la obra acompañando a los trabajadores y que murió atropellado por un camión meses antes de la inauguración.

Es imprescindible que una vez allí, pagues la entrada a la visita guiada. Nosotros como íbamos con una amiga veterana de guerra de Afganistán, teníamos descuento, pero no sale muy caro, unos 18 dolares creo recordar, y antes de bajar hasta la zona donde tienen las turbinas que generan electricidad, te pasan por una proyección en la que te enseñan como empezó el proyecto, los problemas que tuvieron e incluso imágenes de la primera voladura para desviar el cauce del rio, mientras hacían la presa, para luego con los años volver a llevar el rio de nuevo a su cauce original… obrón… que ahora hasta parecería una presa pequeña, pero entonces, y con los medios que tenían… es para quitarse el sombrero.

Una vez ves el documental, te meten en grupos en los montacargas enormes para bajar hasta la misma sala de turbinas, llevándote a través de unos túneles escavados en la roca, y que no tienen pinta que hayan sido adecuados desde entonces. En la sala de control te hacen una pequeña explicación de capacidades, potencias y pequeñas anécdotas, como la de que el arquitecto diseño unas rosas de los vientos que mando hacer en mármol y que puso en casi todas las salas que están bajo tierra para que todos supieran donde estaba el norte, y otra… los relojes de pared que hay en toda la presa en las instalaciones de control, son los originales de entonces, que no han dejado de funcionar.

 

Para mi lo que mas me impresionó, a parte del calor, fue la sala de las turbinas. He estado en varios saltos de agua, diseñando, montando y poniendo en marcha las subestaciones de salida eléctrica, pero saltos de agua de juguete en comparación con este, y la sala de turbinas…. pues sorprende.

Luego ya en el museo, pues había desde los contratos por hora que pagaban unos centavos a los desescombradores, un poco mas a los que colocaban y manejaban los explosivos, otro poco mas a ingenieros y asi…. hasta lo que ganaba el cocinero!!!

Juegos para niños, explicando como se genera la electricidad en una turbina, mostrando el rotor y el estator y como se crea un campo electromagnético a través del cual al mover los polos del generador creas la corriente alterna. Por cierto, todo el rato haciendo referencias a General Electric la famosa y mas grande empresa creada por Edison, y nadie se acordaba del pobre Nikola Tesla, quien inventó el generador de inducción trifasico, y en definitiva la corriente alterna. Hasta entonces, las centrales, se llamaban así porque estaban en el CENTRO de las ciudades porque a Edison no le daba mas la cabeza que para generar en continua. Cuando generas en continua, la caída de tensión es muy alta por transporte, y por lo tanto las generaciones debian estar lo mas cerca posible de los consumos, de las cargas. Es por eso que las “fabricas de generación de electricidad” previas a Tesla, se colocaban en el CENTRO de las ciudades, cerca de los consumos y por eso todo el mundo eléctrico las llamaba CENTRALES…. hasta que apareció Tesla, y Edison le robó muchas de sus patentes… pero bueno, eso es otra historia que daría para un blog.

 

Ya de camino a Las Vegas, decidimos parar en el Lago Mead, que es el que abastece de agua a la Presa Hoover, y que es un Parque Nacional y que tras pagar tus 3 dolares para poder entrar, puedes aparcar el coche y meter los pies en el lago para refrescarte.

Fin de viaje, y vuelta a Las Vegas donde nos esperaban visitas a los casinos y algún que otro espectáculo.